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jueves, abril 18, 2024

Redes sociales son ojos útiles del pueblo; iglesias las usan a conveniencia

Las redes sociales, reales ojos avizores al servicio de la denuncia

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SANTO DOMINGO. Se lee la información en la web de The Indian Expdress: “Cinco jugadores de India colocados en aislamiento mientras las juntas investigan la violación del protocolo COVID-19. Rohit Sharma, Rishabh Pant, Shubman Gill, Prithvi Shaw y Navdeep Saini fueron vistos comiendo en un restaurante en Melbourne en un video publicado en las redes sociales a principios de esta semana”.

Y es que, en cualquier ventana en cualquier lugar del mundo, pueden estar ocultos los ojos del pueblo, prestos a dar la información. Las redes sociales, reales ojos avizores al servicio de la denuncia.

Aquí, en nuestras proximidades: “El obispo de la Diócesis de Nuestra Señora de la Altagracia, Jesús Castro Marte, se refirió a las celebraciones en espacios turísticos, de las cuales circulan videos donde no se acatan los protocolos establecidos por las autoridades dominicanas”. Su punto de apoyo para el reclamo: los videos difundidos por las redes sociales.

En apariencia, los empresarios de la Asociación de Hoteles y Turismo de la República Dominicana (Asonahores), quieren coincidir con el cura Castro Marte, cuando piden a sus miembros el cumplimiento del Decreto Presidencial 740-20, las disposiciones de los Protocolos de Seguridad Sanitaria, todas las disposiciones que sean establecidas en estos momentos de pandemia y apoyan las decisiones del Gabinete de Turismo.

Como también, el mismo Castro Marte al lanzar su queja pasa por encima del hecho de que multaron con cuatro millones de pesos un hotel de Punta Cana por violentar protocolo sanitario impuesto ante el COVID-19.

Se supo de las violaciones del hotel Palladium, en Bávaro, Punta Cana, precisamente a través de las fílmicas captadas y difundidas en las redes sociales.

Hoteles si, iglesias no

(Independientemente de que el grito del cura Castro Marte tenga alguna otra motivación que ya se atrevió a exponer, en crítica anterior frente al gobierno, las redes lo ayudan como a nadie más para que exponga sus razones. El gobierno dominicano cometió la aparente ligera acción de incluir entre las restricciones de toque de queda a las iglesias. Y ahora, las iglesias, en época tan sagrada como la conmemoración del nacimiento de Jesús, hace dos mil veinte años, no puede reunir su coro, ni a seis metros de distanciamiento. Como también quedó incluido en la prohibición presidencial que los ministros y sacerdotes salgan a deshoras a administrar el Sacramento de la Extremaunción a quienes estén en agonía de muerte. Y hay que fijarse en que las prohibiciones del toque de queda son impuestas, precisamente para evitar muertes. Pero, además, las iglesias están más que incómodas con el presidente Luis Abinader y su gobierno, porque ya estos declararon su apoyo al aborto por tres causales. Las iglesias no creen en causales ningunas, al momento de defender lo que se ha predicado durante siglos como un dogma de fe: la prohibición del aborto, por entender que es un asesinato).

Un domingo de Pascua de Navidad con las iglesias vacías y un papa solo en el Vaticano

El Ministro de Turismo, David Collado, notificó que las playas públicas estarán abiertas en el horario establecido para toque de queda, que sería de 5:00 de la mañana a 5:00 de la tarde de lunes a viernes, y de 5:00 de la mañana a 12:00 del mediodía sábados y domingos, cumpliendo con los protocolos de seguridad.

Fiesta en un hotel en violación del toque de queda
Fiesta en un hotel en violación del toque de queda

¿Por qué celebrar fiestas en todas las costas a la vista de toda autoridad, mientras la parroquia de monseñor Castro Marte, la Basílica Nuestra Señora de Altagracia, entre otras, ¿están cerradas por obligación impuesta desde el gobierno? Por eso, Castro Marte sugiere que “el gobierno debe evaluar seriamente las medidas vigentes y proceder a rectificarlas”.

Las iglesias, como es tradición histórica en esas instituciones, podrían estar enfrentando la realidad de los avances tecnológicos al no adaptar los ritos de su misión a los nuevos tiempos.

En el país, la Iglesia Católica y de otras denominaciones menores, disponen de estaciones de televisión, acceso a las redes sociales, y estaciones de radio, con autorizaciones oficiales y el favor de los subsidios que les otorga el Concordato que mantiene amarrado al Estado Dominicano con el Vaticano, lo que les facilitaría el acceso a las masas de manera virtual, con iguales objetivos que los de la prédica presencial. Pero los religiosos parecen andar de espaldas a estos nuevos y ventajosos recursos, ya que cubren mayores multitudes. Pero no apartan sus ojos del famoso Concordato a que amarró Rafael Trujillo, a este país.

No está de más recordar que curas y laicos se reunieron en Roma en el XIV curso sobre exorcismo y plegarias de liberación en Roma, durante cinco días, desde el 6 de mayo del 2019, en el XIV curso sobre exorcismo y plegarias de liberación, para compartir experiencias y hacer frente al supuesto influjo del Maligno (el diablo) que ven ellos en las redes sociales.

La pandemia desatada por el virus COVID-19 ha desatado un febril uso, por necesidad de las redes sociales. El virus ha obligado al confinamiento de la humanidad, las redes sociales inducen a la comunicación total y amplia, indiscriminada de toda la humanidad, gracias a la inteligencia artificial.

¿Acaso es contra eso que está arremetiendo el presidente de Estados Unidos declarado rey de las noticias falsas, Donald Trump cuando firma una orden ejecutiva dirigida a las protecciones legales que evitan que las personas demanden a los sitios web de redes sociales . La medida sigue a su enojo con Twitter por su decisión esta semana de agregar etiquetas de verificación de datos a varios de sus tweets sobre la votación por correo, junto con enlaces a información precisa sobre el tema.  That is all, brother!

 

 

 

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