28.1 C
Santo Domingo
jueves, abril 25, 2024

Volvimos a donde el ebanista, y empieza a entender

Las más leídas

El ebanista del barrio que ya conocemos, encontró unos bachilleres a quienes se les acercó y les puso el tema de la privatización que no entendía bien. Y cuestionó a los bachilleres, en la esquina, en el colmadón. Ya se sabe, bajando una fría.

“Privatizaron todo lo que dejó Trujillo, sí, pero…”, se oía decir y repetir en la conversación de nuestro ebanista y los bachilleres del barrio, quienes humedecían su charla con una pequeña bien fría.

Y fueron enumerando cosas y casos: privatizaron todo lo de Trujillo, y de eso no queda nada. Privatizaron las tierras y todo lo del Consejo Estatal del Azúcar (CEA), y de eso no queda nada. Privatizaron la electricidad que Trujillo la dejó en manos del Estado, y de eso lo que queda es un lío.

Trajeron compañías privadas, para cobrar la energía, el agua. Hoy hablan de privatizar las rutas de las guaguas, como privatizaron para cobrar el uso de las mejores carreteras y avenidas, y se armó otro lío. La compañía de teléfonos está a punto de ser privatizada por los cuatro puntos cardinales, y el servicio no llega para la educación virtual a los muchachos de las escuelas, como es su compromiso público.

Cuántas cosas más han privatizado, preguntaba el ebanista enredado con sus bachilleres. Y éstos respondían que si no sabía que el agua de los canales de riego en los campos está privatizada.

Entonces llegaron en la conversación a la pandemia, al virus, y al ya famoso COVID-19. Y concluyeron en que no hay pruebas para medir al virus, porque eso está en manos privadas de laboratorios y clínicas. Y ahí, se acabó la conversación en medio de mucha incertidumbre, en la charla entre el ebanista y los bachilleres del barrio. Y no es que estuvieran borrachos, porque nada más fue una pequeña que bajaron. Y con eso, nadie se ajuma.

Entonces, insistamos en que, con algunas cosas tan serias, como la privatización y los impuestos, se ande con cuidado máximo. Para que nos podamos entender. Y que lo hagan antes de meternos en el famoso Pacto Eléctrico y otras lindezas, ya mohosas.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Lo último